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Más información sobre trata de personas

¿Qué es la trata de personas?

La trata de personas es el ofrecimiento, la captación, el transporte, el traslado —ya sea dentro del país, desde o hacia el exterior—, la recepción o acogida de personas con la finalidad de explotarlas a nivel laboral y/o sexual.

Es una grave violación a los derechos humanos que lesiona la libertad y la dignidad de las personas. Es un delito generalmente cometido por redes delictivas organizadas que no se detectan a simple vista, debido a la naturalización y el ocultamiento de estas prácticas.

¿Cuáles son las situaciones dónde puede existir trata de personas?

En la mecánica que utiliza la delincuencia se repiten tres fases:

  1. Captación

Los métodos no son siempre fáciles de identificar. Se puede dar mediante el engaño, a través de contactos por medios digitales, ofrecimientos de trabajos tentadores y en casos extremos a través de la violencia física.

  1. Traslado

Facilitan el viaje, prometen alojamiento y comida y alejan a las víctimas de sus afectos en una táctica que les permite hacerlos más vulnerables y dependientes de quien los explota

  1. Acogida

Ya lejos de su hogar los someten de distintas formas: haciéndolos trabajar sin descanso ni posibilidad de buscar ayuda, quedándose con su documentación, estableciendo deudas imposibles de pagar, amenazándolos, llegando incluso a privarlos de su libertad

¿Cómo podés reconocer a una víctima de trata y cuáles son los indicadores?

Debemos todos estar atentos frente a situaciones dónde una persona es obligada o amenazada a realizar tareas prolongadas y en condiciones de explotación de manera frecuente y naturalizada.

Existen indicadores que nos pueden ayudar a detectar que una persona está siendo víctima de una situación de trata:

  • Dice tener poco contacto con su familia de origen.
  • Oculta su nombre o datos de sus familiares.
  • Es tímida/o o reticente para comunicarse y muestra signos de nerviosismo o incomodidad cuando se le consulta sobre su situación familiar o su pasado.
  • Desconoce el espacio geográfico donde se encuentra ubicado, la ciudad y/o país donde vive.
  • Vive en el mismo lugar donde trabaja.
  • No posee documentos de identidad, o ha debido dejarlo en manos de otra persona.
  • No posee o maneja dinero.
  • Se encuentra con capacidad limitada de movimientos o privado de su libertad.
  • Tiene lesiones visibles.
  • Muestra signos de angustia o temor.